“Jujuy sigue siendo mi musa en el dolor por la partida y en la alegría del regreso”

Tilcara Guzmán, un recitador popular hizo huellas literarias en Salta Capital, donde reside desde la década del noventa del siglo pasado. En sus poemas describe el profundo sentimiento por Tilcara porque con edad muy joven tuvo que irse de su pueblo cargado de penas, pero con muchas esperanzas. En Salta tuvo la oportunidad de desarrollarse, publicó siete libros, armó su familia y esa ciudad fue la base de las giras por diversos lugares del país que realiza todos los años para rendir tributo a los héroes argentinos. Estuvo en grandes festivales representando a su Salta adoptiva y en el recorrido de los caminos de artista sumó a sus hijos. Siempre retorna a Tilcara, donde el tiempo no tiene límites, donde sus sentimientos se transforman en letras que el mismo interpreta. Tilcara Guzmán es un poeta moldeado por lágrimas de la distancia.

en un poco más de un año hice seis reediciones de mil libros cada una

A Salta Capital llegué el 12 de enero del 95, y al 14 de noviembre ya tenía mi primer libro publicado” dijo Antonio “Tilcara” Guzmán recordando que ese trabajo “fue presentado en las oficinas de la Compañía Argentina de Seguros Caruso” donde estuvieron presentes, además de gente que lo conocía, quienes aportaron su granito de arena a través de los auspicios. Esto quiere decir que el autor desarrollaba un trabajo de autogestión porque no tenía dinero disponible para encargar las publicaciones a las editoriales. En la actualidad lleva siete libros publicados, resultado de una gran repercusión del primer libro que “en un poco más de un año hice seis reediciones de mil libros cada una” indicó feliz y satisfecho por el nivel alcanzado, quizás por eso siempre expresa que “me he criado en Jujuy, pero Salta me ha malcriado mucho”.

Estoy muy agradecido a Salta porque, como siempre digo, todo lo que necesita un hombre para ser feliz me dio esta tierra; consolidación de sueños, afianzar mi familia, proyectar mi trabajo, pero siempre mi musa está en Jujuy. Sé que no voy a poder manejarla. Jujuy sigue siendo mi musa en el dolor y en la alegría, en el dolor por mi partida, y en la alegría del regreso. Alguien en Tilcara me presentó como el poeta de las lágrimas en la distancia. Me gustó eso de las lágrimas en la distancia. Poeta no, porque es un título demasiado grande para mi persona, quizás ese título me lo dé el tiempo o la gente cuando yo ya no esté. Hoy soy un decidor y un hacedor de cosas populares” describió al hablar de sí mismo.

«he guardado un lugarcito para la posibilidad de algún día volver

En mi mochila no cabían mis penas cuando me vine de Tilcara”. En esa mochila aseguró que “también he guardado un lugarcito para la posibilidad de algún día volver” porque “volver a cantar a Jujuy tiene un sabor muy lindo” sentenció agradeciendo a Dios la hermosa posibilidad de representar a Salta “en varios festivales nacionales, en Baradero, en Cosquín y Jesús María. Cantar en Cosquín es muy lindo, ya lo hice por varios años, ahora ya no me mueve la aguja, como dice los chicos, si me conmueve cantarle a Jujuy en cualquier festival de la Puna o de la Quebrada, o adonde me lleven. A mi edad, lo único que me mueve y me emociona es volver a cantar a Jujuy. Es algo que me enloquece, pero jamás tomaría el regreso como una revancha” expresó quizás trayendo a su memoria que en una oportunidad “el Secretario de Cultura de Jujuy, el Coronel Palliari, después de varios intentos para que me reciba, de viajes a dedo de Tilcara a Jujuy y viceversa porque no tenía dinero, me recibió y las letras escritas ni las leyó, me preguntó que estudios tenía, y le respondí que había estado en el Seminario de Río Blanco y que en ese momento estaba estudiando el terciario, Magisterio en Tilcara, entonces me dijo que siga leyendo porque me faltaba un montón para escribir ni siquiera una cartilla. Ese fue un hecho decepcionante y frustrante” recordó.

«intérprete de mis poesías»

Cuando llegué más que cantor siempre fui recitador. A Cosquín, Baradero o Jesús María fui como recitador, como intérprete de mis poesías y muy pocas veces como cantor del grupo. En Salta me conocen básicamente como recitador. En una ocasión en un festival el locutor que presentaba a los artistas, el Buki Rodríguez, me preguntó mi nombre y le respondí que me llamaba Antonio Guzmán, quizás por el ruido de la música o porque el presentador era sordo, al anunciarme me presentó como Tilcara Guzmán. Y desde entonces quedó ese nombre, que me genera una gran responsabilidad” afirmó sonriente por esa experiencia divertida y determinante en el nombre artístico.

“Hago muy pocas peñas porque tengo un concepto particular de ellas, desde hace 30 años que elegí este trabajo, siempre me presentó en hoteles y restaurantes, cenas privadas y festivales. El turismo es un vector que me permite trabajar durante todo el año. La temporada baja para mí, diciembre, enero y febrero, salgo de gira por el país aprovechando una declaración de interés que me brindaron allá por el 2.000 por rendir tributos a los héroes argentinos” indicó al responder sobre su pronta partida hacia el sur de Jujuy y Salta.

Van a encontrar testimonios de las redes sociales a bordo de mi Ford Falcon (tiene cuatro). Siempre en ellos los van a ver con la bandera argentina en el techo. Recorro pueblo por pueblo desde La Quiaca hasta Misiones, de Mendoza hasta Mar del Plata, siempre lo hago en diciembre y enero, después regreso al norte para algunas actividades como mi Carnaval. Es el momento de descanso hasta Semana Santa, cuando largamos nuevamente la temporada de actuaciones” subrayó en medio de llamadas telefónicas y charlas con comerciantes, empresarios y representantes del gobierno jujeño y salteño, quienes aportan un monto económico para un viaje de dos meses.

«agarré mi bombo y me fui a Buenos Aires»

En el momento de crisis, cuando nos oprimía la situación económica y política del 2.000, agarré mi bombo y me fui a Buenos Aires, y allí comencé a trabajar. Me junté con otros músicos  como Hugo Cardona de Maimará. Actuaba en las calles, en restaurantes y peñas, y en ese momento comencé a visitar a Centros de Jubilados, que yo había visto en Salta” remarcó al responder como nacieron las giras que le permitieron recorrer varias provincias argentinas.

De Buenos Aires le queda el haber recorrido casi toda la provincia y de tanto andar “me di cuenta que tenía mucha gente que me seguía y alquilé al menos en dos oportunidades un teatro”, el más recordado El Ombligo de la Luna, que está al frente del Shopping del Abasto, para hacer sus presentaciones. Una de ellas, le permitió comprarse una camioneta para dirigirse al sur. Después de un tiempo retornó a Salta, fue cuando por las experiencias vividas con su poncho salteño con la bandera argentina bordada, decidió rendir tributo a los héroes argentinos; Güemes, el Coronel Arias y quienes se fueron recientemente de esta tierra como el doctor Favaloro, el doctor Laureano Maradona, los Veteranos de Malvinas, y quienes entregaron sus vidas en la lucha ante el COVID. “Cuando vuelvo a Salta armo el proyecto, lo presenté y lo declararon de interés cultural en la Secretaría de Cultura de Turismo de Salta. Desde aquel momento hasta la actualidad la declaración sigue vigente. Quise hacer lo mismo con Jujuy, pero no pude lograrlo. Si logré a nivel nacional, pero fue por pocos años” añadió.

«Las tareas que realizó el personal de salud fueron épicas»

En Salta alquilé uno de los teatros más bonitos para realizar un homenaje de agradecimiento a la gente (enfermeros, mucamas, personal de salud que higienizaba a los enfermos que no podían moverse, cocineros) que cuidó a quienes contrajeron el COVID, como mi caso que en un hospital público agonicé con ese bicho. Ese homenaje fue un tributo a esa gente que fueron héroes porque pusieron su vida para ayudar a los infectados. Las tareas que realizaron el personal de salud fueron épicas, tan importante como las que hicieron los héroes de la independencia” resaltó.

Ya en el final de la entrevista comentó que “el oficio de músico me sirvió para ser feliz porque mis hijos estudiaron con las propinas que recibí, con la venta de los discos, con los cachet, a veces magros, de los hoteles o de quienes nos habrían las puertas” y en claro ejemplo de agradecimiento a la actividad sus hijos, que tienen sus profesiones (Abel de 25 es licenciado en psicopedagogía, Irupé, licenciada en psicomotricidad, Nagual, es licenciado en Química y encargado del sonido, y Malka, que eventualmente canta, es licenciada en Ciencias de la Educación), se hacen un espacio para acompañarlo, “para no dejarme solo, y para abrirse pasos, el Dúo Cela-G anda muy bien. A mis casi 60 años esta experiencia es un objetivo cumplido” puntualizó, agregando que “todos mis hijos cantan conmigo. Son incondicionales. El mayor, Abel, es el que le pone la música a las letras, como el caso del tema; A Tilcara volver por amor, que inclusive ya tiene un video grabado con Jama Récord. La producción tuvo auspicios de los amigos y de los comercios, de los viejos y los nuevos. Digo nuevos porque son los hijos de aquellos que hace años también sumaron sus auspicios. Esa realidad es emocionante”.

En el momento de la despedida dejó una frase que enaltece la profesión de los músicos; “Soy de hacer escenario en las esquinas de las calles, siempre he cantado o recitado como si tuviera un auditorio de 10 mil personas, a veces he recibido aplausos de gente conocida, de los propios, otras veces de los turistas, y alguna que otra ocasión he padecido de las más tristes soledades de no tener público. Soy orgulloso de esta profesión, de ser músico itinerante, de andar de un lado para otro, soy agradecido de la vida y respetuoso de los trabajos”.

Gracias por calificar! Ahora puedes decirle al mundo como se siente a traves de los medios sociales.
Lo que acabo de ver es..
  • Raro
  • Asqueroso
  • Divertido
  • Interesante
  • Emotivo
  • Increible

DEJANOS TU COMENTARIO: