La Capilla de Candonga es uno de los mayores exponentes de la arquitectura colonial

Se encuentra cerca de El Manzano, localidad situada al norte de la ciudad de Córdoba Capital. Fue construida en 1730 y se encuentra bajo la advocación de Nuestra Señora del Rosario.

La Capilla de Candonga es un templo erigido a mediados del siglo XVIII en las Sierras Chicas de Córdoba, a unos 53 km al norte de la capital provincial. Es uno de los mayores exponentes de la arquitectura colonial en Córdoba por su originalidad y belleza de líneas arquitectónicas; por lo cual fue declarada Monumento Histórico Nacional en el año 1941.

El inicio de la construcción de la Capilla data del año 1720 y originariamente funcionó como el oratorio de la Estancia Santa Gertrudis, estancia que trabajaba en el envío de mulas al Alto Perú. Es por ello que popularmente se la conoce con el término de Candonga —que significa mula de tiro- y no con el de la advocación religiosa.

Cuando Don José Moyano Oscariz compró la propiedad en 1720, la habría rebautizado como Estancia del Rosario de Santa Gertrudis, realizando notables mejoras, como plantaciones de frutales y huertas. Construyó un molino con su acequia para la molienda (el cual hoy ha sido restaurado por el actual propietario de estas tierras), adquirió un alambique (aparato para destilar un líquido por medio del calor) y botijas para la elaboración y conservación de vino. Hizo edificar una casa y construir un corral para la guarda del ganado, constituido por yeguas, caballos, vacas, mulas y bueyes. Don Moyano Oscariz, devoto de la Virgen María, viendo que la comarca carecía de un lugar para el culto divino, emprendió la obra de la capilla que luego colocó bajo la advocación de Nuestra Señora del Rosario. Según documentos de la época la construcción se realizó entre 1720, año en el que se compraron los terrenos, y 1762, fecha grabada en una antigua campana.

La Capilla de Candonga se compone de una pequeña Nave y la Sacristía, todo cubierto con bóveda de medio punto, un campanario, una escalera de piedra de ocho peldaños en uno de sus lados.

En el interior puede observarse el trabajo artesanal del tallado a cuchillo de la baranda del comulgatorio y detalles de la imagen que demuestran la intervención de artistas indígenas en la decoración del templo; mientras que en su altar principal se encuentra la venerada imagen de la Virgen del Rosario. Hoy sus viejos muros descansan en un ambiente de serenidad, enmarcados en un diáfano cielo azul en la inalterable soledad de la montaña, como únicos compañeros y testigos del paso del tiempo.

El acceso a la capilla se realiza con vehículo particular recorriendo un camino de cornisa, con excelentes vistas panorámicas, partiendo desde la localidad de El Manzano o desde Agua de Oro. También desde el Aeropuerto Internacional de Córdoba Capital, desde donde se debe continuar 30 km hasta «El Manzano», donde hay que doblar a la izquierda en dirección oeste; desde allí se debe seguir por un zigzagueante camino de tierra por aproximadamente 10 km.